Serge Gainsbourg [Histoire de Melody Nelson] 1971

Este disco trata íntegramente de una historia de amor y pasión extrema nacida del atropello que un hombre montado en su Rolls-Royce perpetra intencionadamente sobre una adolescente con la intención de que se enamore de él.
A partir de aqui, continúo.

Cuando Serge Gainsbourg falleció el 2 de marzo del año 1991 Francia se paralizó. Nadie se lo podía creer. El gran Gainsbourg siempre estaba ahí, con su pose despreocupada y hedonista, su eterno Gitanes humeante en una mano, y su vaso de Pernod en la otra.
François Miterrand dijo de él: "...era nuestro Baudelaire, nuestro Apollinaire, elevó la canción a la categoría de arte".
Y es que más allá del Gainsbourg personaje provocativo y provocador donde los haya (recomiendo la lectura de su increíble biografía escrita por Sylvie Simmons), fue un hiperactivo, inclasificable y genial compositor de canciones. De cientos de canciones.

Nacido como Lucien Ginsbourg, de padres rusos emigrados a Francia tras la revolución Soviética, sufrió la ocupación francesa por parte de los Nazis y el rechazo de muchos de sus compatriotas por sus orígenes judíos y hasta de las prostitutas del otro lado del río debido a su peculiar físico, aunque quien lo diría años después tras ver algunas de las conquistas en su haber (Brigitte Bardot, Jane Birkin y un largo etcétera...). Comenzó a ganarse la vida desde muy joven como pianista en bares y garitos de la capital gala, al igual que su padre, y pronto comenzó a componer sus propias canciones, hasta que decidió publicar su primer álbum como Serge Gainsbourg. De ahí a la leyenda.

Irónico, cáustico, explícito y hasta a veces grosero, Gainsbourg provocó uno de los mayores revuelos culturales en 1969 al publicar su mítica "Je t´aime moi non plus" (traducida como "Te quiero...yo tampoco") a dúo con su eterna Jane Birkin y escrita en un principio para cantarla con Brigitte Bardot (de hecho se registró una primeriza versión del tema a cargo de Bardot), que muchos ven como un auténtico alegato sexual explícito debido a los gemidos y jadeos de Birkin a lo largo de la canción y que servidor sin embargo, ve como una declaración de no amor absoluta (Gainsbourg se inspiró en la célebre frase de Dalí sobre Picasso) y como un tema con un gran regusto amargo y dolorido. "Je t´aime moi non plus" fue prohibida en varias emisoras de radio europeas y consiguió (si, todo un logro) que la Iglesia Católica amenazase con excomulgar a quien escuchase la canción (!!!).

Tras este auténtico revulsivo y rotundísimo éxito, Gainsbourg había trascendido las fronteras de su país y de la chanson, convirtiéndose en todo un icono popular a nivel mundial sinónimo de escándalo y controversia.

Queréis caldo?, pues tomad tres tazas:

Gainsbourg publica en 1971 "Histoire de Melody Nelson", disco en el que Gainsbourg narra en primera persona cómo se enamora de Melody Nelson, una inocente y virginal adolescente británica a la que atropella intencionadamente montado en su Rolls-Royce Silver Ghost con la intención de seducirla, de hecho la seduce, consigue acostarse con ella (todo ello muy bien descrito en "L´Hôtel Particulier") y falleciendo ella prematuramente quedando en el protagonista el imborrable recuerdo de su recién florecida belleza, algo que ni siquiera el tiempo conseguirá cambiar, algo eterno.

Toda una lindeza, verdad?. Si a ello añadimos que en la portada figura Jane Birkin caracterizada como la virginal Melody Nelson vistiendo únicamente unos jeans y abrazada a un osito de peluche (como dato curioso, Birkin en el momento que le hicieron la foto estaba embarazada de 4 meses de Charlotte Gainsbourg futura protagonista de "Antichrist" de Lars Von Trier entre otros films), tenemos la polémica servida.

Pero dejemos este tipo de historias aparte porque creo que ya se cuentan demasiadas por otros sitios.
Musicalmente "Histoire de Melody Nelson" es impecable. Basado principalmente en un apoyo rítmico sencillo de batería, bajo y guitarra como estructura para la susurrante voz de Gainsbourg, habría que destacar también los increíbles arreglos orquestales escritos por Jean-Claude Vannier que conforman una exquisita suma, una auténtica obra maestra que no llega a los 30 minutos.

Desde la sexualísima "Melody" a la preciosa "Valse de Melody", este álbum es una de las más brillantes obras creadas en nuestro viejo continente en la década de los 70.

Sólo alguien como Gainsbourg sería capaz de hilar tan finamente una historia tan turbia como esta y crear una serie de canciones tan perfectas como las que forman este disco.
Destacar que "Histoire de Melody Nelson" ha servido de inspiración y de disco de cabecera (reconocido por los propios artistas, conste) para gente como Air (por favor, escuchen "Ah Melody"), Portishead, Jarvis Cocker o Nick Cave.
Y de clase, estos que acabo de citar están bastante servidos, verdad?.
A modo de reflexión y/o apunte, diría que este disco sería impublicable en estos tiempos de lo políticamente correcto.

No te pierdas un pedazo de maravilla como esta. Déjate seducir por este pedazo de cabrón (con cariño, conste) que una vez fue el inocente y enfermizo niño llamado Lucien Ginsburg para transformarse en ese pedazo de genio de carisma eterno e indiscutible llamado Serge Gainsbourg.

Se lo merece y sobre todo, vaya que si se lo ganó.

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